Del enojo a la reflexión

Días de contraste

DISCUTIR… creo que esto engloba en gran medida que es lo que estuve haciendo las últimas semanas, discutir con proveedores, le he levantado la voz a la niñera de mis hijos, a mis propios hijos, mi pareja, con algunos amigos… la única persona que puede estar tranquila, que se ha librado de mi mal humor es mi exesposo. ¡Curioso pero cierto!

JAMÁS habíamos tenido tan buena relación (mi exesposo y yo) como hasta ahora después de divorciados, así que se puede decir que tenemos poco más de un mes felizmente divorciados.

Tengo 16 años de conocer a José, los primeros 3 años como amigo, después empezamos la relación de “amigos con derecho” para pasar a ser novios (en varios bloques en los que cortamos) hasta finalmente casarnos en noviembre de lo que este año se cumplirían 9.

Hago la explicación de todos los años que tengo de conocerlo y un poco del contexto de cuanto de ese periodo es lo que hemos vivido en cada etapa de nuestra relación porque de los últimos 11 años, yo creo que nos hicimos mucho daño gran parte del tiempo… claro que pasamos también momentos buenos, pero nos lastimamos y mucho, sobre todo, el último año.

De marzo a la fecha cuando entró Charito a mi vida, pensaba “lo estoy viviendo y no lo creo” … que podía realmente ser feliz, aspirar a ser feliz en pareja, era algo yo creo no había experimentado a ese nivel antes.

El día del divorcio José tuvo que hacerme un favor, de ir a mi casa por un pasaporte, después de concluido el juicio, camino a la escuela de nuestro hijo para hablar con la psicóloga le estuve contando sobre Güero (amigo que falleció del que hablo en mi post del 20 de septiembre) y en esa plática sentí que recuperé a mi amigo… a mi amigo del 2005, fue muy diferente la forma de hablar con él y lo que me decía… todo cambió.

Las siguientes semanas del divorcio, ya que se ha estabilizado la situación familiar me ha permitido irme incorporando más a mi negocio, pero esto a su vez ha tenido algunas consecuencias negativas.

Por un lado, al sacar mi lado más empresarial sale mi personalidad “bitch” estilo la película “Devil´s wear Prada” (El Diablo viste a la moda), también el estar más involucrada en los negocios me hace dedicarle menos tiempo a mi pareja, a mis hijos, que batallé de inicio en encontrar un equilibrio y un factor que jamás vi venir: como mi pareja tomaría mi relación con mi ex, o al menos eso fue lo que yo interpreté lo que fue ocasionando mucho ruido y caos, sumando que por mi temor que fuera a molestarse o como tomaría las cosas dejé poco a poco de compartirle cosas y a tomar decisiones que nos fueron distanciando.

Esta última semana fue sumamente complicada, lo más importante de todo es que logré mantenerme sin recaídas a pesar de mis altibajos emocionales, y finalmente después de muchos intentos de hablar con mi pareja sin lograr realmente comunicarnos, sin entendernos… llegamos al verdadero origen del problema… como una no muy adecuada reacción me hizo actuar de una forma en la que no estábamos llevando nuestra relación… y así se fueron sumando más y más y más detalles.

Te platico todo esto porque las personas que solemos tener algún tipo de trastorno de conducta alimentaria solemos ser más impulsivas que el resto, también somos más egoístas, con un sentimiento de rechazo… lo que nos hace cerrarnos y asumir que todo es nuestra culpa o que no somos comprendidas sin buscar de manera calmada que fue lo que realmente detonó todo.

En mi caso te puedo explicar que la magia de mi relación actual, la base ha sido siempre el tener una comunicación totalmente transparente, no tener secretos, compartirnos todo, que realmente mi pareja sea mi persona de confianza… aún sabiendo que habrá cosas que le pueda contar y no le van a gustar o comprender desde un inicio… pero si no hablas, si no compartes, yo siento que personas como yo, que padecemos ansiedad, somos impulsivas nos hace que solo asumamos y nos hagamos mentales… y eso nos lleva a generar más ansiedad, a sentirnos solas, deprimidas y poder tener más fácil recaídas, (debo reconocer en este punto que malamente algunas de mis recaídas han sido producto de enojo, como una manera de “castigo” hacia mi pareja por no sentirme entendida… de la misma forma que lo hacía con mi mamá de niña, yo rompía la dieta, me ponía a comer teniendo atracones, cuando me enojaba)

Creo que debemos de dejar de pensar en los estereotipos, en los paradigmas que nos dicta la sociedad… y que incluso nos recomiendan las amistades… el consejo que he recibido desde mi hermana mayor, amigas cercanas (muchas) es “no se le debe de contar todo a tu pareja” … o el hecho que haya gente que no pueda entender como tengo tan buena relación con mi exesposo porque lo “normal, lo común” es que termines odiando a tu exesposo… finalmente por eso te divorciaste, ¿correcto? Porque no funcionaba… pero ahí es donde mucha gente se contra dice … porque incluso mucha gente que es gay, que defiende el aborto, inclusión, etc… también ha criticado la forma en que estoy manejando mi vida… y creo que lo más importante sería… no existen reglas, y cada situación se debería evaluar en base al contexto, no porque no sea algo usual lo que “todo mundo hace, o la mayoría” lo hace algo malo, tan aceptado debería de ser que yo pueda tener como pareja a una mujer con la que he decidido tener una relación de completa transparencia, como el hecho que pueda tener una excelente relación con mi ex esposo.

¿Tú que piensas de lo que digo? ¿te hace sentido?

PD: En cuanto a mi tratamiento de la bulimia con el día de hoy serían 27 días sin vomitar desde mi última recaída.

En mi terapia continuo con mi psicóloga de 1 a 2 veces por semana, además que he iniciado con un nuevo psiquiatra de la Cd de México y acudo a meditación 1 vez por semana.

Mi medicamento actual son 150 mg de topiramato, 10 mg Brintellix, Tafil .50 mg 3 veces al día y he estado tomando adicional 30 mg de acxion en las mañanas para controlar más el tema de la ansiedad /  el querer comer.