¿Qué me hizo llegar hasta donde estoy?

Cómo tomé la decisión de iniciar el tratamiento

¡Saludos de nuevo!, ahorita me encuentro un poco ansiosa… (es la forma “políticamente correcta” de decir que quiero morder a alguien, ¡LITERALMENTE!) ya me tomé el medicamento de la noche, espero pronto me haga efecto… aún sufro las secuelas de haber abierto la “caja de Pandora”.

Mañana hace ya 1 semana que leí algunas hojas de mi diario que escribí en mi adolescencia, lo hice buscando como inicié con mi bulimia y terminé reviviendo mi relación tormentosa con mi madre que tuve en esa época (relación que ya no es así, sin embargo, me dolió mucho recordar); pero como me dijo mi psiquiatra “no tiene porque ser una condena vitalicia”. Así que es normal que duela unos días, y después a continuar con mi vida.

El tratamiento que estoy a punto de cumplir 2 semanas de haber iniciado este viernes, lo empecé a planear con mi psiquiatra desde Noviembre aproximadamente, pero realmente mi salud emocional comenzó a venirse a pique desde hace 1 año aproximadamente.

En el ámbito familiar entró un nuevo “jugador” que no estaba en planes, un hermoso bebé al cual no pude lactar como a sus otros hermanos (a su hermana antes que a él la lacté casi año y medio… y a el apenas pasé los 5 meses). En cuanto a sobrepeso… traía un 50% más que en mis otros embarazos y después de 6 meses de haber parido seguía con gran parte de esos kilos (a diferencia de los otros embarazos).

En el ámbito laboral, ahora tenía la carga de ser yo la cabeza del negocio, mientras que antes (años atrás, con mis otros hijos) contaba con periodo de lactancia, mi descanso por maternidad.

Por más dietas, detox que intentaba hacer solo veía la báscula y mi estrés aumentar, hasta que estallé, tuve una especie de colapso nervioso; tuve una especie de “intervención” por parte de mi esposo y mi mamá… y siendo el tema del físico uno de los que más me preocupaba (y estando yo tan mal anímicamente que NO quería ir a consulta… tenía en esos momentos la terapia con mi psiquiatra en stand by) busqué la opción de hacerme una cirugía bariátrica, como solución (según yo) a) a mi sobrepeso b) a mis atracones c) a mi bulimia

Para poder realizarte una cirugía bariátrica en estos días sólo necesitas una cosa: DINERO, realmente ya se ha convertido en una forma más de los doctores de hacer negocio, lo que antes era una operación solo para “gordos muy gordos”… ahora solo requieres tener dinero para operarte, y en mi caso contar con la aprobación de mi psiquiatra, (con el cual regresé a terapia) debido a la operación,  porque literal a mi doctor  (el que me operó) le “valía madre” (expresión de los mexicanos para decir que NO LES IMPORTA) si yo vomitaba después del mes de operada lo que quisiera. Lo importante es que yo no fuera a vomitar durante el primer mes, sobre todo, las primeras 2 semanas de operada porque ahí sí, pondría en riesgo mi vida.

Así que me operé, con un IMC (índice de masa corporal) de 30 (pesando 80 kg) midiendo 1.63 mts de la manga gástrica teniendo de compañera y amiga a mi buena amiga “Neupax Sublingual” la cual me hacía ver (YEY) unicornios y arcoíris TODO el tiempo… me sentía en una película de pixar 24/7 (tenían que tenerme bien dopada para asegurarse que no fuera a querer hacer alguna “gracia” de querer vomitar… porque hasta ahí llegaba mi vida… ¡literalmente!)

Al mes vino mi peor momento, la etapa de duelo, cuando pude volver a comer “comida normal” y pensé que había perdido a mi bulimia por siempre… que no iba a poder vomitar; me QUERÍA MORIR TODOS LOS DÍAS, la pregunta no es, cuándo, sino CUÁNTAS VECES AL DÍA DESEABA MORIRME.

A los 2 meses (como buena bulímica) descubrí la forma de como vomitar de nuevo, y la felicidad regresó a mi vida (al contarlo sé que sueno patética, pero así me sentí, al menos por un momento)

Pero la realidad es que ya nada fue igual, ahora mis atracones era comerme ¾ de un sándwich, adicional era mucha molestia lograr vomitar (por lo mismo de la operación) aunado a que mis hijos cada vez son más grandes y ¡cada vez son más! Ya no tengo tiempo libre, las que son madres no me dejarán mentir que ¡ya no podemos ni ir al baño con la puerta cerrada!

Comencé a tener también varias confrontaciones con amigos que quiero mucho, sin necesidad, buscando que me rechazaran; todo comenzó a convertirse en crisis, parecía que buscaba excusas para tener una razón de estar ansiosa y buscar vomitar, hasta que pensé “voy a quedarme sola o peor aún, dejar a mis hijos sin madre y no es lo que quiero, tengo que ponerme un alto”.

Decidí adicional al psiquiatra buscar también apoyo psicológico en un lugar donde también dan clases de yoga, reiki y otras actividades complementarias que pueden ayudarme mucho en mi tratamiento.

Debido a mis hijos, mi familia, el negocio, opté en conjunto con el psiquiatra, llevar a cabo el tratamiento sin suspender mis actividades del día a día (es decir, sin internarme) por lo que de inicio se definió este plan de 5 semanas en el cual cuento con una enfermera 24/7 que me apoya dándome mi medicamento, me acompaña en el negocio, mis actividades, con mis hijos, a cocinar, come conmigo, etc. Y lo más importante, debo buscarla cuando me siento ansiosa (al grado de querer vomitar) para que me administre un medicamento sublingual y pueda tranquilizarme de manera inmediata la ansiedad, sin embargo, esta última parte sí estoy tratando de que sea lo menos posible, para no estar muy dopada, al menos entre semana que es cuando puedo controlarme mejor.

En resumen, así es como llegué hasta aquí… y espero poder continuar con este tratamiento de forma exitosa, la verdad no ha sido nada fácil, y aunque las enfermeras a veces pareciera “que no hacen nada” si no fuera por ellas… este plan ya habría fracasado, fácilmente ahora mismo estaría teniendo un atracón aprovechando que todos están dormidos y nadie me ve…

Agradezco infinitamente los mensajes que he recibido, tanto los comentarios directos a este blog, como los inbox por Facebook, Instagram y Twitter; gracias por sus palabras de aliento y por las personas que han tenido la confianza de compartirme sus historias.

Abrazo afectuoso.

Pd: actualmente peso 57 kg.

12 ideas con respecto a “¿Qué me hizo llegar hasta donde estoy?”

  1. Increible todo lo que pudiste hacer estando en ese estado!!!!fuerza!!!!te seguire leyendo…animo y amor desde bs as

  2. Espero que te mejores pronto.
    Yo padezco de depresión crónica “atípica” . Hace muchos años….espero salir de esto…..?

    1. Hola, primero que nada muchas gracias por leerme y por escribirme… ¿junto con tu depresión padeces algún otro desorden?
      cuando necesites a alguien que te lea, no dudes en escribirme, ya sea por aquí, correo, o en mis redes sociales, aunque sea a distancia podemos hacernos compañía…abrazo afectuoso!

  3. El ascenso a una gran cima comienza con el primer paso. Adelante, eres una guerrera…!!!

  4. Wow! Admiro la valentía con la que contás tu historia. Yo sufro de TCA desde los 15 años (actualmente tengo 27); creo que siempre, por una cosa u otra, busco la excusa para adelgazar: que mi carrera, que mi familia, que mi vida amorosa (un desastre), que mi gastritis crónica por nervios (eso SÍ me provocó un descenso de peso rápido pero doloroso como pocos). A veces me pregunto si quiero recuperarme ó si planeo seguir mi vida con esto a cuestas. No soy, SEGÚN LA SOCIEDAD, una chica gorda ó siquiera “fea” (es más, trabajé como modelo durante años), y aún así… es lo único que veo al mirarme al espejo. Cualquier fracaso, se lo recrimino a mi peso. El tema es que, aún siendo medicada (tengo TPL), no consigo sentarme a hablar de esto con una psicóloga sin que mi primer idea sea “Esta maldita va a querer engordarme”. Simplemente no puedo… O quizás, no quiero.

    1. Hola! agradezco el que me leas y tu apertura para contarme parte de tu historia… sabes, yo nunca pude adelgazar con la bulimia… o talvez al principio pudo servirme para no engordar más pero a diferencia de muchas personas que me han escrito, a mi me ocurre que cuando estoy en crisis con los atracones/vomito subo de peso terriblemente… yo busco que comer porque quiero vomitar… para mi el vomitar es un desahogo… también hay ocasiones que he vomitado por caer en atracones no planeados y sentir culpabilidad de no querer subir de peso, o cuando estando a dieta toda la semana, llegaba el fin de semana y me permitía tener 1 atracón… lo que nos sucede es que después de tantos años de estar con este problema ya es una compulsión, ya ni siquiera importa cual fue la causa que nos orilló a empezar a vomitar porque después de tantos años hemos caído en un acto compulsivo…
      no se si leíste mi último post donde menciono que el 95% de las bulímicas padecemos algún otro desorden. No se si ya te han realizado por ejemplo un encefalograma para ver que físicamente no haya nada mal con tu cerebro, que no tengas un trastorno de control de impulsos, etc… en cuanto a TPL yo tengo rasgos de personalidad limítrofes… muchas bulímicas lo tenemos…pero de eso a tener el trastorno es muy diferente… ¿fuiste ya diagnosticada por un psiquiatra? te mando un abrazo!

      1. Fui correcta y correspondientemente diagnosticada en Febrero de 2016 (más o menos para estas fechas, si mal no recuerdo). Sospechaba qué era lo que estaba mal conmigo y que los primeros síntomas habían aparecido en la adolescencia, pero en el desastre que era mi vida por aquél entonces (Nota mental: detallar más sobre ello en mi propio blog, el cual estás invitada a leer cuando quieras), no le di importancia, creyendo que era todo “más de lo mismo”.

  5. Leyendo esto y comienzo a hacer una comparacion quiza indebida, yo por ejemplo hace tiempo no voy a terapias porque termine hartandome de eso, en cambio, en este momento (ya hace casi una año) vivo con mi novio, cuando no estoy en el trabajo o visitando a mi madre paso el dia detras de el, cuando llego de la calle me siento a su lado y le cuento todo lo que hice, como con el se me hace imposible comer sola, y si por ejemplo estamos durmiendo y se levanta, cosa que hace siempre, yo voy detras suyo para no quedarme sola porque me da ansiedad quedarme sola. Hasta ahora e pensado que esta completamente mal pero lo hago porque es mi manera de evitar los episodios de ansiedad. Ahora pienso que tal vez no sea tan malo porque realmente trato de buscar apoyo, aunque por muchas cosas y comentarios he terminado creyendo que “soy una necesitada y dependiente”.

    1. Hola Missis, gracias por leerme y muchas gracias por tenerme la confianza de compartirme parte de tu historia, la verdad estoy sorprendida la falta de información que existe sobre nuestra enfermedad, ayer platicaba con un chico que tiene una novia enferma y me preguntaba “entre ustedes las bulímicas tienen algún grupo?” y yo (?¡?¡?¡)
      el al contarme el caso de su novia, así como el estar leyendo el caso de muchas otras chicas que me han contado parte de sus historias me doy cuenta que realmente podremos “compartir” el mismo trastorno alimenticio, pero como podrás haber visto en mi post “hablemos de números” (si no lo has leído te invito a leerlo donde presento estadísticas y más información sobre nuestra enfermedad así como de la anorexia y comedores compulsivos) el 95% de las bulímicas tenemos algún otro trastorno, ya sea de personalidad, ansiedad, control de impulsos, por lo que puede llegar a ser muy diferente el tratamiento que requiramos, hay bulímicas que si usan la bulimia para bajar de peso, yo les he explicado que en mi caso, cuando he tenido mis peores ataques de atracones/bulimia yo subo de peso, yo compraba y comía pensando de antemano que ya lo iba a vomitar… no se si te han hecho estudios como encefalograma, te han diagnosticado para ver que otros trastornos son los que padeces, que rasgos de personalidad destacan, como en mi lo obsesivo compulsivo así como la personalidad limítrofe, trastorno de control de impulsos, control de emociones.

      un abrazo

Los comentarios son cerrados.